viernes, 19 de diciembre de 2008

Vacaciones de Navidad


Estoy a una tres horas de coger la carretera camino al hogar, la familia, las comilonas, los turrones; los cientos de besos, abrazos y felicitaciones de gente que el resto del año a penas cruza una mirada contigo; los sms felicitando las fiestas con alguna frase “original”... Pero sobre todo me voy a respirar el frío, tocar la nieve y sentir el calor humeante de la sangre.

Esto último puede sonar un tanto desagradable, bueno, cuando llevas mas de veinte años viviendo una tradición, lo desagradable se transforma en místico y meter las manos entre las vísceras de una bestia de 150 kg puede ser muy desestresante, me refiero a la “matanza del cerdo”.

Pero bueno, costumbrismos aparte, el caso es que como el anuncio de turrón, vuelvo a casa por Navidad y allí no hay intrneeeeeeeeeeeeee, así que este rinconcito va a estar un poco abandonado.

Os deseo a todos unas muy Felices Fiestas, que disfrutéis mucho y que comencéis el Año Nuevo cargados de energía y si puede ser con algún pellizco de la lotería!!

Un besito a tod@s!!

¿Cuál es el espíritu de la Navidad?

miércoles, 17 de diciembre de 2008

Je ne dors pas


Me sumerjo en un fluido que no reconozco.
Algo etéreo que flota sobre mí, que me envuelve y me anula.
No soy.
Me hundo en la profundidad de un calor que me posee.
Una suavidad eléctrica que no acierto a discernir si sale de mí o me penetra.
Es un fluido, sin duda, eso que me eleva y me domina.
No soy.
Sólo me evaporo, sólo energía.
Una inmensa corriente eléctrica agitada por dedos invisibles.
Consumida.
Sentir al margen del tiempo, las palabras y los pensamientos.
Y al final, explotar en miles de partículas centelleantes que lo salpican todo.

Amohaku

sábado, 13 de diciembre de 2008

La luz de la Luna


Cuando los recuerdos ya no duelen, cuando los sacas del armario y no arrancan lágrimas, sólo sonrisas.
Cuando las canciones te elevan en vez de hundirte y los detalles llegan al extremo de remover tus entrañas.
Y una voz perdida en el tiempo se reencuentra en tus oídos...
Y un dibujo...
Y una marca...
Una frase y lo que ella oculta...
Nada más ni nada menos.
Una intención bajo la luna llena...
Un Becquer que me asalta en la madrugada para dejarme un sabor de boca vacía.
Una promesa que quizá sólo persista en el papel.
Y quizá...
¿Qué pasaría si pasase?

"Así está perfecto"

jueves, 11 de diciembre de 2008

La flor del mal



—No vuelvas a hacerlo.

—¿Volver a hacer qué?

—Unirte emocionalmente a alguien que te presta un mínimo de atención porque te sientes sola. La soledad es una condición humana, nadie conseguirá llenar nunca ese vacio, lo mejor que puedes hacer es conocerte a ti misma, saber lo que quieres, y no dejar que te desvien del camino.


lunes, 8 de diciembre de 2008

León



Nunca pensé que me atrevería a hacer un viaje así pero, cuando me quise dar cuenta, estaba dando botes en un Jeep camino a una aldea en medio de la sabana africana.

Llegamos a una especie de campamento que, después de todo, podría incluso parecer lujoso: tenía baños, catres con mosquitera... eso sí, no había luz eléctrica ni agua corriente.

Me encontraba, nunca mejor dicho, en medio de la selva, rodeada de una tranquilidad absoluta y envuelta por unos sonidos que en la vida podría haber imaginado, capaces de estremecer y reconfortar al mismo tiempo. Y allí estaba yo, tendida dentro de mi mosquitera, con los ojos abiertos de par en par, escuchando la respiración de las fieras que al día siguiente saldríamos a buscar.

Entonces lo noté, un escalofrío me recorrió, se me paró la respiración y un impulso hizo que saliera de la choza. Debían ser alrededor de las tres de la madrugada, estaba descalza y asustada. Entonces lo vi: Me miraba a los ojos y yo no podía moverme, ni siquiera gritar, se acercaba pero, a medida que lo tenía encima, mis nervios desaparecían. Llegó a mis pies, me olisqueó y dio media vuelta. Se estaba yendo y yo estaba paralizada y maravillada al mismo tiempo, entonces se giró, como si me estuviera invitando a que lo acompañase.




Dejé que se me llevara.

Cuando ya no sabía dónde estábamos ni cómo regresar me entró el pánico, pero con la primera mordida todo mi temor desapareció.

Al día siguiente desperté dentro de la mosquitera, agotada como si hubiese caminado toda la noche y con la piel llena de heridas superficiales.

Aún se me eriza la piel cuando oigo rugir un león.

Aún tengo la marca de sus dientes en mí.




"Ahí está, ahí lo tienes"

jueves, 4 de diciembre de 2008

La cita



Café en mano miraba por la ventana, mi aliento al contacto con cristal formaba una mancha de vaho que insinuaba que la mejor opción era quedarse en casa, el informe meteorológico así lo confirmaba: un hombrecillo bajito y trajeado recomendaba en la televisión tener precaución en las carreteras. La nieve estaba cubriendo de bonitas estampas todo el país y, a mi, sólo me apetecía acurrucarme entre las mantas y dejar que terminara el día.

En estas cavilaciones estaba cuando me sobresaltó el teléfono:

‒¿Síii?

‒¿Elvira? Soy Carla, te llamo desde Londres, esto es un aburrimiento...

‒¡Nena! Me alegra mucho oírte, ¿cómo que aburrido!, no seas exagerada....

‒Cómo lo oyes tía, llevamos toda la semana casi sin salir del hotel, hace un tiempo espantoso...

‒Mmmmh, aquí tampoco se está mucho mejor, dan nieve en casi todas partes...

‒Ten-go que con-tar-te aaaaaalgoo...

‒¿Que has hecho, bruja?

‒Bueeeno, digamos que ha sucedido algo que te alegrará el día

‒No seas... ¡Dime! ¡Quéee?

‒¿Qué día es hoy?

‒Jueves

‒¿Qué más?

‒Es 4 de diciembre, ¿y?

‒¿Y...? Venga, no es tan difícil de adivinar, piensa.

‒Jueves, 4 de diciembre de... Oh, no me lo puedo creer

‒...

‒...

‒¿Viri? Tía, ¿estás bien? ¡dime algo!

‒Ya...ya es, el día.

‒¡Exacto! Acaba de coger un avión para ahí...

No te creo... ¿va a venir?

Sí. Oye, escucha, tengo que bajar a recepción para recibir a los de la junta. Te llamo en un par de horas.

Eh... vale, hablamos luego. No me lo puedo creer... ¿Estas segura?

Va para ahí, no te pongas histérica, por favor... Un besito Viri.

Un besito Carla.


Cuando colgué sólo era capaz de oir mi corazón palpitando acelerado en el pecho, o en mis oidos, no estaba segura. Me quedé de pie en el recibidor un rato, no sabría decir cuanto. Mirando a la nada, sin poder pensar, sin saber qué hacer... No quería imaginar nada, no quería soñar despierta. Pero venía hacia aquí... ¡Y yo con estos pelos!

Lo que siguió fueron una serie de innumerables rituales estéticos que culminaron frente al armario. Una vez que hubo más ropa sobre la cama que dentro de él sentencié “¡No tengo nada que ponerme!” y con las mismas, me puse lo primero que cogí de la montaña de ropa y me fui de compras.

Estaba probándome una falda marrón cuando sonó el móvil. Era un número que no conocía.

¿Síii?

¿La señorita Elvira?

Soy Francisco Gutierrez, el albacéa testamentario de su tía abuela Regina.

¿Cómo? Disculpe... no entiendo. Mi tía murió hace muchos años.

Efectivamente. Diez años para ser más precisos. Necesito concertar una cita con usted. ¿Sería posible que nos encontrásemos hoy?

Eh...claro, digo ¡No!, bueno... no estoy segura

Mire señorita, es importante que pueda verla hoy, no nos llevará mucho tiempo. Sólo tiene que firmar unos documentos y le haré entrega del legado de su tía. Soy consciente de que debería haberla avisado con antelación, pero la señora Regina especificó en su testamento que sería hoy y sólo hoy el día en que debía suceder todo.

Discúlpeme pero... esto me suena muy raro, yo no sé si podré verle hoy. Tengo... quizá... el caso es que no sé si estaré disponible.

Hagamos una cosa, dígame dónde está usted ahora y yo voy para ahí.

Eh... bueno, el caso es que, estoy de... estoy haciendo unos trámites... Quizá, mire, le daré mi dirección. Puede encontrarme allí en un par de horas ¿de acuerdo?

Por supuesto.


No había más días en el año, tenia que pasarme todo hoy. No entendía muy bien lo de mi tía, pero tampoco me extrañaba, era una mujer muy excéntrica. Recuerdo que cuando era pequeña me echaba las cartas y decía que yo tenía algo especial. Media familia la tomaba por loca y la otra media le tenía miedo, a mi me parecía una mujer extraordinaria.

Cuando llegué a casa me apresuré a adecentar mi habitación y preparé café. El señor Francisco llegó puntual.

La conversación fue brevísima, prácticamente se limitó a que firmara una especie de acuse de recibo, me entregó un sobre y se marchó.

Puse el sobre sobre la mesa de la cocina y me senté. Estuve mirándolo un rato, preguntándome qué habría dentro. Al fin me decidí a abrirlo.

Querida Elvira, mi niña. Fuiste la única que no me tenía por loca, quizá ahora te lo estés replanteando pero confía en mí. Sé que todo te está yendo bien, lo leí en las cartas, cada una de las veces, sé que confiabas en lo que te decía, no fallé ni una vez, lo sabes. Confía ahora también en mí. No vayas a la cita. Por favor, no acudas.

Te quiere, tu tía Regina.


Aquella tarde salí con mi traje nuevo hacia el centro de Madrid. Desde luego no iba a impedírmelo una carta venida casi desde ultratumba. Menos aun hoy. Hoy era el día en que mi vida podría cambiar.

Hacía casi 13 años conocí a un estudiante de periodismo del que me enamoré al primer sarcasmo. Me lo había presentado Carla, era su compañero de proyecto y un mes después estábamos saliendo. Pasamos juntos dos años maravillosos hasta que llegó el momento de separarnos. Fue un 4 de diciembre. El se iba a Londres y yo me quedaba en Madrid, ninguno estaba dispuesto a mantener una relación a distancia, pero teníamos la certeza de que estábamos hechos el uno para el otro, así que hicimos un estúpido pacto: Si en 10 años todavía nos amábamos, nos reuniríamos en la puerta del Sol para decidir quién se mudaba. Yo casi lo tenía olvidado. Los primeros años sí que mantenía la ilusión, pero a medida que pasó el tiempo se convirtió en algo que recordar con ternura y nada más. Hasta que no me avisó Carla y noté cómo se me aceleraba el corazón, no fui consciente de lo muy arraigado en mis entrañas que tenia aquel sentimiento.

Así que allí estaba, caminando por Calle Mayor, esquivando a la gente y con los nervios a flor de piel.

Había un gran corro en medio de la acera disfrutando de la estática originalidad de un mimo, por supuesto yo no tenía tiempo que perder, los rodee presurosa y casi dando codazos, incluso una mujer me increpó de forma alarmante.

Tenía la nota de mi tía apretada dentro del bolsillo del abrigo, resbaló de mi mano cuando levantaron mi cuerpo del asfalto.

miércoles, 3 de diciembre de 2008

I Try, Macy Gray

Esto me pasa por pegarme atracones de "Ally McBeal" a horas intempestivas.



Letra: I try

Games, changes and fears
When will they go from here
When will they stop
I believe that fate has brought us here
And we should be together
But we're not

I play it off but I'm dreamin of you
I'll keep it cool but I'm fiendin.

I try to say goodbye and I choke
I try to walk away and I stumble
Though I try to hide it it's clear
My world crumbles when you are not near
Goodbye and I choke
I try to walk away and I stumble
Though I try to hide it, it's clear
My world crumbles when you are not near

I may appear to be free
But I'm just a prisoner of your love
I may seem alright and smile when you leave
But my smiles are just a front

I play it off but I'm dreamin of you
I'll keep my cool but I'm fiendin

I try to say goodbye and I choke
I try to walk away and I stumble
Though I try to hide it it's clear
My world crumbles when you are not near

Here is my confession
May I be your possesion
Boy I need your touch
Your love kisses and such
With all my might I try
But this I can't deny

I play it off but im dreamin of you
I'll keep my cool but I'm fiendin

I try to say good bye and I choke
I try to walk away and I stumble
Though I try to hide it it's clear
My world crumbles when you are not near



Traducción: Intento

Juegos, cambios y miedos
Cuándo se irán de aquí
Cuándo se detendrán
Creo que el destino nos ha traido hasta aquí
Y que deberíamos estar juntos
Pero no lo estamos

Voy a citas pero estoy soñando contigo
Estaré bien pero me derrumbo

Intento decir adios y me ahogo
Intento alejarme y tropiezo
Pensé en intentar ocultar esto que es tan claro
Mi mundo se viene abajo cuando no estas cerca
Adios y me ahogo
Intento alejarme y tropiezo
Pensé intentar ocultar esto que es tan claro
Mi mundo se viene abajo cuando no estas cerca

Puedo aparentar ser libre
Pero no soy más que una prisionera de tu amor
Puedo parecer estar bien y sonreir cuando te vas
Pero mi sonrisa es sólo una fachada

Voy a citas pero estoy soñando contigo
Estaré bien pero me derrumbo

Intento decir adios y me ahogo
Intento alejarme y tropiezo
Pensé en intentar ocultar esto que es tan claro
Mi mundo se viene abajo cuando no estás cerca

Aquí está mi confesión
Podría ser tu posesión
Chico, necesito que me toques
Tus besos amorosos
Con toda mi fuerza lo intento
Pero no puedo negar esto

Voy a citas pero estoy soñando contigo
Estaré bien pero me derrumbo

Intento decir adios y me ahogo
Intento alejarme y tropiezo
Pensé en intentar ocultar esto que es tan claro
Mi mundo se viene abajo cuando no estas cerca

"Tengo una gran imaginación pero, a veces, me gusta que las cosas sucedan de verdad"
Ally McBeal a Bobby Donnell