jueves, 26 de marzo de 2009

La ira de los necios


La ira es para los necios.
Llámame necia, pues.
Que ni las sonrisas me sacaron tantas palabras,
ni las caricias me hicieron tanto enrojecer.
Los puñales que escupa,
saldrán hirientes de mis entrañas,
aunque no tengan dónde clavarse
saldrán con ímpetu.
Con el mismo con que lancé ilusiones
y cayeron es saco roto.
No me pidas que me calle ahora.
Déjame sangrar como mejor sé.
Mañana todas mis palabras no tendrán sentido,
ni razón,
y preferiré haber guardado silencio.
Pero si no exploto ahora como fuego,
me derramaré después.

5 comentarios:

Anónimo dijo...

Vaya...cualquiera diria que estas enfadada.

Sònia... no tan fiera... dijo...

:) la ira no es tan mala.. simplemente encauza sentimientos..

... vale, es que soy de las que tiene un genio muy vivo que puede desembocar en tormenta...

Besos...

Anónimo dijo...

Muy bueno!
Saludos.

JUAN PAN GARCÍA dijo...

Lamas,parece muy triste tu poema. ¿Qué doloroso desamor te lo ha inspirado?
Mira, si te empeñas en sangrar, me convertiré en vampiro para que no se pierda nada de tu esencia.
Aparte de eso, muy bueno el poema.
Un beso.

David L. dijo...

A mi tu poema, más que triste, me parece poderoso.

Podrías recitarlo a susurros delante del espejo y gritando por la ventana.

:)